Nairobi
Por el contrario, si uno lo observa a través de un microscopio, o un telescopio, y deja por un momento de analizarlo como si fuera un escribano que trabaja bajo los efectos de la cocaína, y se entrega a los encantos que ofrece, puede ser un espacio fantástico para disfrutar de todo tipo de aventuras.
Si sos argentino o argentina, y te gusta el fútbol, ahora estás feliz porque somos los mejores Messi GOAT Di María genio, Campeones, oh oh oh oh oh, la bandera, el himno, les ganamo a los francese esétera esétera esétera
Si en cambio sos un entomólogo de la realidad y pensás que nuestros muchachos son 26 atletas multimillonarios que viven en Europa y lo único que tienen en común con vos es haber nacido en la misma región administrativa llamada Argentina, que tiene apenas 200 años, porque un poco antes era España y otro poco sus habitantes ni sabían de la existencia de los europeos y los países, bueno, ahí el fútbol y el campeonato mundial no dejan de ser una pavada absoluta que no debería proporcionarle ni la más mínima felicidad a un sereno de funeraria que tuvo la desgracia de olvidarse el teléfono en su casa.
Con el microscopio, todo es apasionante, incluso para el más acérrimo defensor de la idea de que nada tiene sentido. Con el microscopio no te importa si tiene sentido. Volvés a ilusionarte como un niño, porque ves que hay mucho más que lo que podés ver con tus ojos.
Si tenés un mínimo de curiosidad, esta analogía que acabás de leer debería ser suficiente para estimular en tu cerebro todo tipo de asociaciones neuronales conducentes al despertar.
Con el telescopio pasa más o menos lo mismo, solo que lo más grande es un poco más abrumador y nos sorprende un poco menos.
Nos da más seguridad, nos reconforta más, saber que somos más grandes que algo maravilloso.
Ya sentirnos un átomo cualquiera de un grano de arena que está olvidado hasta de sus propios compañeros en un desierto infinito puede ser un poco menos diver.
Como habrás visto, la "realidad" es un punto de vista. Depende de la capacidad de percibir y el foco de quien percibe.
Una eventual inteligencia infinita podría percibir todo el universo al mismo tiempo desde todos los puntos de vista posibles.
¿Por qué o para qué lo haría? Eso es algo que no puedo responder.
Yo soy apenas un señor que no tiene nada mejor que hacer que sentarse a escribir escuchando Ozric Tentacles, Technicians of the Sacred.
¿Cómo se divertirá la inteligencia infinita? ¿Necesitará divertirse?
¿Qué sé yo? ¿A mi qué me importa? Sho tengo mis propios problema.
Shamalo ego, shamalo la concha de tu hermana, a mi un día me duele una muela, otro tengo que ir a trabajar, un día tengo la suerte de garchar, un día estoy enamorado, otro aburrido, otro soy un maestro zen, otro me compro un telescopio, otro otro otro y redepente, según parece, se acaban losotro y uno pasa a ser abono de la próxima generación de proxenetas y pederastas confesos o inconclusos.(Lector, lectora, te ruego disculpes esta última frase. En realidad no pertenece a este escrito, pero no me animé a quitarla porque tal vez si pertenezca y en este momento estoy sheno de dudas. Tengo hasta duda la podonga).
Tenía muchas ganas de escribir proxenetas y pederastas confesos... no me preguntes por qué... no es que sepa bien qué quieren decir esas palabras, tengo apenas una impresión aproximada, pero me salió, como si fuera un eructo, o un gas.
¿Son acaso esas expresiones del infinito menos nobles que un concierto de Vivaldi?
¿Eh?
Como te decía, vamos avanzando a los ponchazos, moviéndonos. Vos ahí, sho acá. Asher, oi, maniana, ¿qué más da? Girando como galaxias, a toda velocidad, sin más objetivo que desplazarnos, sintiendo el viento en el rostro como un motociclista (si es que las galaxias tienen rostro... para nosotros no, porque apenas le podemos ver el rostro a las personas que amamos, imaginate si se lo vamos a ver a una galaxia).
Estuve a punto de mostrarle una foto de una galaxia a una profesional del amor que me atiende de vez en cuando. No me animé. Tuve miedo que me dijera algo por gentileza, por oficio, y no quise mezclar el ganado. Atenderme para ella es trabajo. Tengo que respetarla. Si le interesara discutir conmigo sobre budismo zen me invitaría a tomar algo. Estoy seguro de que ella sabe que yo seguro aceptaría. Estoy seguro de que ella sabe que yo la amaría sin piedad ni misericordia. Es una profesional del amor!! Sabe todo lo referido a atracción, deseo, enamoramiento, encantamiento, y SEXO, claro, la manifestación más representativa del amor en lo que a expresión carnal se refiere. Después hay otros tipos de amor, pero son mucho más aburridos.
Cuando el genuino amor desinteresado e incondicional que produce el deseo más salvaje se junta con un sexo potente, con un puro encuentro de los cuerpos en todas sus latitudes y longitudes sin reservas ni contraindicaciones, con ese dale que va que es tan lindo y tan anhelado por todos como una válvula de escape por lo menos momentánea a la realidad al por mayor a la que tantas veces nos vemos sometidos un poco por necesidad y otro por costumbre, ahísesperimenta lamagia.Garchar con amor. Qué lindo.
Ahí te importa todo un carajo. Que se vaya a la mierda la selección argentina, los políticos del mundo, el cambio climático, las sinfonías debe toven, todo... qué te importa.
Lo único que querés es garchar y reírte.
El resto es literatura.
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